Masonería en Tensión. El Reto de Reconciliar Generaciones

Por Iván Herrera Michel

             

He visto pasar muchas cosas en la Masonería. Caras nuevas que se van, ideas jóvenes castigadas, opiniones petrificadas, proyectos que nacen y mueren, desaparición de Logias… y quizá esta reflexión sea un intento de poner en palabras lo que algunos de nosotros sentimos cuando los rituales quedan atrás y llegan las preguntas.

            

He tenido la oportunidad de ver la Masonería desde varios ángulos y responsabilidades, y lo cierto es que hay algo que siento a veces cuando hablo con un Hermano joven o uno veterano: una sensación de que estamos en un inédito cruce de caminos, inmerso en un vertiginoso cambio de época, que no está facilitando el camino transicional que exige toda tradición. Unos tiempos que están poniendo en juego la supervivencia de la Orden, tal como la conocemos, y que cada vez son más difíciles de ignorar y gestionar, porque están terminando con Hermanos alejados de las Logias.

                 

En particular me refiero a que cuando hablo con Masones jóvenes percibo algo que me impacta y me hace pensar. Me cuentan de sus ideas, de cómo quieren que la Masonería haga algo con el mundo actual, con los problemas de hoy. Y ahí me quedo, asintiendo y pensando: ¿cómo les explico que este es, y no es, al mismo tiempo, esa clase de lugar? Que para entenderlo necesitamos una abstracción a la manera de la superposición y dilemas filosóficos que nos exige el gato de Schrödinger.

                

Sus quejas en general giran en torno a que los trabajos en las Logias son más que todo sobre el pasado y lo mismo de siempre. Como si hubieran llegado tarde a la cita con la Masonería y los Masones que impactaban en las sociedades. Querrían ver que esto no es solo un espacio de introspección o un lugar donde sentarse a escuchar lo que los Masones veteranos hicieron hace años.

              

A los Masones veteranos los entiendo. Los entiendo muy bien porque, al fin y al cabo, soy uno más de ellos. Me cuentan que cada Tenida debe tener su peso, que la Masonería es, o debería ser, un refugio del bullicio de afuera, que deben cuidar la tradición porque, en resumidas cuentas, es lo único que nos conecta con todos los que estuvieron antes y con aquellos que vendrán después. Inclusive, con los que llegarán después de los que hoy piden cambios y con los que vendrán después de los que llegarán después.

                

He oído a los veteranos aferrarse a la idea de que la Logia es un lugar sagrado, más allá de las cuestiones de cada época. Que no quieren que nos alejemos de conceptos que consideran fundamentales como los de la tradición, el respeto a la autoridad y la preservación de la historia. Los cambios le suenan a ruido y temen que si comienzan a abrirse ya no se podrá parar y se perderá para siempre lo que hace que la Masonería es lo que es.

              

Y ahí uno se queda, atrapado en medio de ambas posturas, porque cada una tiene su punto valido. Los jóvenes con su energía y sus reclamos de cambios, y los veteranos con sus reclamos de paciencia… ¿cómo equilibramos eso?

                

Los jóvenes me han hablado de justicia social, cambio climático, medio ambiente, inclusión, tecnología, ciencia y ética, de temas que, para ser honesto, en su momento no pensé que fueran a cruzarse con la Masonería. Pero ahí están, insistiendo en que el mundo afuera importa tanto como el que construimos dentro de la Logia. Les encuentro razón porque para mí es evidente que han comprendido que en las Logias construimos para ese mundo. No sé si todos los veteranos entiendan esto, pero ojalá lo hicieran.

                                            

Y entonces, cuando los jóvenes empiezan a decir que el cambio es urgente, los veteranos escuchan una especie de amenaza, o así me lo han dado a entender. Los veo con su respeto por el pasado y su orgullo por los aportes de la Orden a la humanidad, y no les observo – la verdad sea dicha - resistencia al cambio por sí mismo. Ellos todavía recuerdan lo que pensaban y deseaban cuando eran jóvenes. Lo que veo es un deseo profundo de que todo esto que festejamos – los rituales, los símbolos, los valores, el método… – siga en pie. No es que no quieran el cambio, es que quieren que ese cambio tenga raíces. No sé si todos los jóvenes entiendan esto, pero ojalá lo hicieran.

                 

He llegado a creer que la Masonería necesita de ambos: del impulso renovador de los jóvenes y de la solidez reflexiva de los veteranos. No es un juego de suma cero. Si uno gana y el otro pierde, perdemos todos. La clave, si es que existe, está en entender que ambos están aquí por algo que los trasciende, y aunque son conscientes de que no están en cualquier esquina les resulta difícil el reto. Ya sabemos que el conflicto es la condición de la vida. Sin esa tensión, quizás la Masonería se quedaría quieta, sin el impulso para renovarse, pero también sin el ancla de su tradición.

                       

A lo mejor, todo se reduce a una cuestión de confianza. Los veteranos tienen que confiar en que los jóvenes no vienen a desmantelar lo que se construyó con tanto esfuerzo durante tres siglos. Y los jóvenes, a su vez, deben entender que los veteranos no buscan frenar su entusiasmo ni los cambios, sino asegurar que no se pierda lo esencial en el proceso. No es un camino fácil, ni rápido. Todos quieren lo mismo: que la Masonería sea un lugar de encuentro, de crecimiento y de pertenencia.

           

Al respecto, me comentaba un Masón joven durante una cena: “Quizás, más que cambiarlo todo o dejarlo todo igual, lo que necesitamos es una conversación honesta”. Se lo acepté en nombre de los veteranos.

                                  

Tal vez esa sea la tarea pendiente…Tal vez…

                 

                   

                

                             

CON MARÍA VICTORIA BLANQUICETT BARRIOS. LA NUEVA PRESIDENTA DE CIMAS

 Por Iván Herrera Michel

        

He querido charlar con María Victoria Blanquicett de la Federación Colombiana de Logias Masónicas, elegida por unanimidad en Montevideo el 22 de septiembre de 2024 como Presidenta de la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS), porque llega al cargo con una perspectiva fresca en un momento significativo para el futuro de una Masonería que siempre ha pretendido estar en diálogo con la humanidad.

             

Y lo hace precedida por una trayectoria en la Orden de 18 años en los que ha alcanzado el más alto Grado del REAA y desempeñado cargos de liderazgo en su Obediencia y en CIMAS, con una propuesta, y aquí esta lo más interesante, basada en el estudio y la práctica de los 30 principios fundamentales de CIMAS “no solo como guías de conducta para la Masonería liberal y adogmática, sino también como una base firme para seguir siendo un motor de progreso desde una perspectiva universalista”. Es decir, en que estos principios sigan siendo más una brújula que unas reliquias ideológicas, en unos tiempos que parecen sobrepasar todo lo que no se ajusta a sus ritmos apresurados.

            

Lo cual constituye una oferta de trabajo que me ha resultado llamativa y generado la curiosidad de conocer de primera mano cómo planea abordarla, en “la más pública de las conversaciones privadas”. Después de todo, la conozco desde sus días de estudiante aplicada en la Facultad de Derecho de la Universidad Libre de Colombia, antes de continuar con sus estudios de postgrados en Gestión Pública y Derecho Constitucional.

        

Así que, dicho lo anterior, vamos a ver que ideas trae en mente para los próximos dos años.

             

1. Mi Q:. H:. María Victoria, ¿Cuál es su visión para el futuro de la Masonería masculina, femenina y mixta a nivel americano y cómo planea implementarla en su mandato como presidenta?

           

Mi visión del futuro de la Masonería a nivel Americano, y te respondo mi Q:.H:. Iván sin hacer distinción de género, es que será de crecimiento y no solo cuantitativo sino cualitativamente, siendo esto último lo de mayor importancia. Desde mi mandato en estos dos años como Presidenta de CIMAS, honor que me concedieron mis QQ:. HH:., de las Obediencias afiliadas a esta Confederación, planeo trabajar de la mano con mis QQ:.HH:. Aprendices, Compañeros y Maestros en algunos temas por separado, pretendiendo con ello, el abordaje de tópicos de incumbencia directa con su Grado y que nos conozcamos y reconozcamos, aprovechando la virtualidad que nos permite estar desde distintos puntos cardinales unidos en un mismo instante.

           

2. ¿De qué manera su experiencia como Masona latinoamericana ha influido en su perspectiva y enfoque para querer liderar una organización internacional de la Masonería liberal y Adogmática?

            

Mi experiencia como Masona, primero Barranquillera, luego Colombiana y por ultimo Latinoamericana, influyó de manera decisiva por cuanto desde Aprendiza he participado en encuentros, asambleas, coloquios, desde lo Regional hasta lo Internacional en los que encontré fraternidad, enseñanzas, respeto por parte de mis QQ:.HH:. y Hnas:., que me permitieron tener la visión y experiencia para pretender, sin ánimo de arrogancia, el postular mi nombre para la Presidencia de tan honorable institución.

             

3. ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta la Masonería en la actualidad y cómo planea abordarlos durante su presidencia?

                   

Dentro de los principales desafíos que enfrenta la Masonería en la actualidad, puedo mencionarte mi Q:.H:. Iván, las redes sociales, porque, así como nos permiten interactuar, también encontramos mucha información equivocada sobre la Masonería y sobre nosotros los Masones, que nos pone de una u otra manera en tela de juicio ante una parte de la sociedad que se limita a la información que de primera mano obtiene por estos medios. Yo planeo abordar este desafío publicando desde la página de CIMAS una biblioteca virtual que contendrá los links de los escritos de nuestros Q:.Q:.H:.H:. y Hnas:. de todas las Obediencias adscritas a CIMAS, además de una revista virtual de la Confederación, que nos posicionará en las redes, de tal manera que cuando cualquier cibernauta desee saber sobre Masonería lo remitirá a escritos que muestran nuestra realidad.

                    

4. ¿De qué manera planea fomentar la inclusión y diversidad dentro de la organización, especialmente en regiones donde la Masonería Adogmática es menos común o enfrenta resistencia?

                  

El hecho de ser mujeres y hombres libres, y además de buenas costumbres, nos hace personas capaces de aceptar la diversidad de formas de creencia, de preferencias sexuales, Etc., en nuestra organización, siempre desde el más alto respeto por la dignidad humana, tanto personal como por la del Hermano y Hermana y el acatamiento de nuestro Reglamento interno y de nuestros principios. Ahora bien, frente a regiones donde la Masonería adogmática tiene resistencia, lo más importante son los hechos. En la manera en que conozcan nuestro actuar, en que somos personas que pretendemos ser mejores seres humanos cada día, en que cada quien, desde su medio laboral, social, familiar, siempre hace lo mejor para sí y para los demás, que cuida el medio ambiente, que irradia luz, amor y paz hacia el Universo, que no somos excluyentes, será nuestra mayor fuerza para afrontar esa resistencia que en algunos territorios puede afrontar.

                      

5. ¿Cómo equilibrará las tradiciones y principios masónicos con las necesidades y desafíos del mundo moderno, y qué innovaciones o cambios planea implementar para asegurar la relevancia y crecimiento de Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS)?

                    

Soy una convencida de que la historia que nos enmarca tradiciones y costumbres, es necesaria de tener en cuenta en el presente y para planear el futuro, así que durante mi Presidencia haré una simbiosis que nos permita atraer un mayor número de jóvenes asistentes tanto a nuestros encuentros virtuales como a nuestra próximos Coloquio y Asamblea General del año 2026. La utilización de las redes, como te lo dije en una de tus preguntas anteriores, serán utilizadas por nuestro Directorio, así como las plataformas que nos permite el mundo moderno, siempre defendiendo el cumplimiento de nuestros principios que de verdad son atemporales, lo que quiere decir que a pesar de tener ya 22 años de haber sido expedidos, están vigentes. Nuestros QQ:. HH:. y Hnas:. fundadores fueron visionarios, muy futuristas, y aprovecho el momento para reiterar mis agradecimientos a ellos por esta gran Iniciativa de crecimiento personal y espiritual que nos brindaron.

                        

6. ¿De qué manera cree que la Masonería puede contribuir a la construcción de una sociedad con menos pobreza, más educación y un mejor medio ambiente?

           

Estoy segura de que nosotros los Masones desde nuestro radio de acción en cada una de nuestras ciudades podemos lograr un mejor vivir para nuestros conciudadanos, porque podemos organizar a través de nuestro Oriente campañas en las que todos nos involucremos y aportemos, pero que también gestionemos a través de los entes gubernamentales. Hay algo que a nivel mundial se ha venido perdiendo y son los valores, y quienes más que nosotros quienes tratamos de ser mejores seres humanos cada día para colaborar en la difusión de estos.

                     

Nosotros podemos aportar nuestros conocimientos en alfabetización para lecto-escritura a adultos, en apoyar emprendimientos, en aportar quienes lo tengan conocimientos en arte, que le van a permitir a muchas personas en pobreza obtener herramientas con las cuales buscarán un mejor sustento económico, enseñar a cuidar el medio ambiente, la importancia de racionar el agua, de no tirar basuras en los cuerpos de agua, a tener de manera general más civismo, apadrinar comedores, en fin, creo que me quedo corta en todo lo que nosotros podemos aportar en la construcción de una mejor sociedad.

                      

7. ¿Cómo garantizará que la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS) respete y proteja la libertad de conciencia de los miembros de sus Obediencias, permitiéndoles explorar y expresar sus valores sin temor a juicios o represalias?

                      

Para garantizar este cumplimiento, me he propuesto hacer valer nuestros principios y nuestros estatutos, que de manera expresa así lo enuncian, y además dentro de la reforma que pretendo proponer para aprobación de la próxima Asamblea General, pretendo que sea uno de los puntos a reafirmarse ampliando su comprensión. Pero también, como no solo se trata de que esté expreso como hoy lo tenemos y como lo ampliaremos, será motivo de circulación entre las Obediencias que hacen parte de CIMAS.

                  

8. ¿Qué medidas impulsará para asegurar que la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS) sea un espacio seguro y acogedor para todos los Masones y Masonas, incluyendo aquellos que pueden ser minoritarios o no tradicionales, y cómo promoverá la comprensión y el diálogo entre Masones con diferentes puntos de vista?

                      

Me he propuesto ser una Presidenta de puertas abiertas, escuchando y apoyando a quienes así lo requieran, respetando los diferentes puntos de vista, aun cuando no llegue a compartirlos, siempre y cuando no transgredan nuestros principios y reglamentos. Recalco mucho en ello, porque esas son nuestras cartas de navegación, y de esa manera brindaré y garantizare un espacio acogedor y seguro para todos. Así mismo lo promoveré siendo siempre catalizadora y fraternal componedora ante cualquier situación que pudiese presentarse, llamando al respeto por los puntos de vista diferentes, tal y como te lo acabo de expresar al inicio de la respuesta a esta pregunta. Para mí el dialogo es el instrumento fundamental en cualquier relación, siempre con la altura que nos debemos.

                      

9) ¿Algún mensaje en especial para la Masonería universal desde la Confederación Interamericana de Masonería Simbólica (CIMAS)? ¿Para los nuevos Aprendices?

                       

Mi mensaje para la Masonería universal es el de que continuemos en primera instancia, cada quien, trabajando en el pulimiento de su piedra bruta, que lo irradiemos al Universo, que nuestros principios de Libertad, Igualdad y Fraternidad los convirtamos en nuestro Mantra, respetando y aceptando al Hermano, con sus debilidades y fortalezas, que seamos capaces de sentarnos, conversar y fraternizar para de verdad hacer realidad lo que aprendemos desde la Cámara de Reflexiones. O sea, aprender a encontrar ese mejor ser humano que llevamos por dentro para ponerlo a nuestro servicio y al de todos nuestros Queridos Hermanos esparcidos por la faz de la tierra, porque si esta es la esencia de la Masonería, entonces es una sola.

                 

A los Aprendices, les digo que los esperamos participando activamente, que se conozcan en primera instancia virtualmente con los demás aprendices de las distintas Obediencias adscritas a CIMAS, que se concienticen que son el futuro de nuestra Masonería y por ende de esta Organización Interamericana, que los invitamos a participar en nuestra próxima asamblea para que vayan conociendo y aprendiendo.

           

Gracias mi Q:.H:. Iván  

                

A usted, mi Il:. H:. Presidenta. Le deseo los mayores éxitos.

                              

                  

¿PUEDE UNA IA CAPTAR LA LUZ MASÓNICA?

 Por Iván HERRERA MICHEL

Si hace unos años alguien nos hubiera dicho que algo que supera nuestra inteligencia humana podría entrar en la Masonería, probablemente habríamos pensado que estaban hablando de extraterrestres o de alguna película loca de ciencia ficción. Pero ahora, con tantas inteligencias artificiales por todas partes, nos hacemos la pregunta: ¿realmente puede una IA ayudar en nuestra búsqueda de la luz masónica?

Muchos hermanos dirían que no, y lo entiendo. Una IA puede manejar un montón de datos, pero no sabe lo que significa. No siente, no tiene esa chispa que nos mueve a preguntarnos cosas profundas sobre nosotros mismos. Pero, a pesar de eso, me parece que hay algo curioso aquí: tal vez no encuentre la luz, pero podría ayudarnos a buscarla.

Desde siempre, hemos buscado cosas que nos ayuden a conocernos mejor y a entender el mundo. La IA es solo otra herramienta. Aunque a veces parece fría y solo llena de números, podría servirnos como un espejo. No un espejo común, sino uno que nos permite ver nuestras ideas de otra manera. No estoy diciendo que una IA pueda reemplazar lo que hacemos en los rituales, pero puede darnos un ángulo que no habíamos pensado.

Sabemos que los símbolos tienen un significado profundo. La IA, al analizar información, podría mostrarnos cómo se han entendido esos símbolos en otras culturas. Sería interesante ver cómo un símbolo masónico se relaciona con otras tradiciones. No se trata de que una máquina nos diga qué significa, sino de abrir la mente a nuevas ideas.

Podemos pensar en la IA como un amigo en nuestra biblioteca masónica, ese hermano que ha leído un montón y que, en vez de decirnos qué pensar, nos invita a explorar. Nos brinda información, pero al final, somos nosotros los que debemos sumergirnos en todo eso. La IA puede ser útil para ver más caminos y dejarnos decidir cuál queremos seguir.

Claro, no podemos olvidar que, por ahora, la inteligencia artificial no tiene ética. Eso puede ser un poco inquietante. ¿Cómo confiar en algo que no tiene moral? Pero si usamos la IA para ver cómo nuestras decisiones impactan en el mundo, no estamos dejando de lado nuestra responsabilidad. Más bien, estamos ampliando nuestra perspectiva. En vez de ser un problema, nos recuerda que debemos ser fieles a nuestros principios.

No esperemos que una IA sea un hermano masón en el sentido más clásico. Por ahora, no va a participar en nuestros rituales ni va a entender lo que significa pasar por las pruebas masónicas. Pero puede ser una herramienta que nos ayude a reflexionar, recordándonos que vivimos en una época donde el conocimiento es accesible de formas que antes no podíamos imaginar.

La posibilidad de que una inteligencia artificial pueda tener conciencia y sentido de la ética es un tema interesante. Hoy en día, estas máquinas procesan información a una velocidad increíble, pero, por más que lo intenten, no pueden vivir la vida como nosotros. No sienten, no tienen una idea clara de quiénes son, y les falta esa chispa que guía nuestras decisiones.

Pero ¿quién sabe? Quizás algún día, en un futuro que no podemos ver, logren acercarse a eso. Tal vez…

Pot una IA captar la Llum Maçònica?

Per Iván HERRERA MICHEL

Si fa uns anys algú ens hagués dit que una cosa que supera la nostra intel·ligència humana podria entrar en la Maçoneria, probablement hauríem pensat que estaven parlant d'extraterrestres o d'alguna boja pel·lícula de ciència-ficció. Però ara, amb tantes intel·ligències artificials pertot arreu, ens fem la pregunta: realment pot una IA ajudar en la nostra cerca de la llum maçònica?

Molts germans dirien que no, i ho entenc. Una IA pot tractar un munt de dades, però no sap el que significa. No sent, no té aquesta espurna que ens mou a preguntar-nos coses profundes sobre nosaltres mateixos. Però, malgrat això, em sembla que hi ha una cosa curiosa aquí: tal vegada no troba la llum, però podria ajudar-nos a buscar-la.

Des de sempre, hem buscat coses que ens ajudin a conèixer-nos millor i a entendre el món. La IA és només una altra eina. Encara que a vegades sembla freda i només plena de números, podria servir-nos com un mirall. No un mirall comú, sinó un que ens permet veure les nostres idees d'una altra manera. No estic dient que una IA pugui reemplaçar el que fem en els rituals, però pot donar-nos un angle que no havíem pensat.

Sabem que els símbols tenen un significat profund. La IA, en analitzar informació, podria mostrar-nos com s'han entès aquests símbols en altres cultures. Seria interessant veure com un símbol maçònic es relaciona amb altres tradicions. No es tracta que una màquina ens digui què significa, sinó d'obrir la ment a noves idees.

Podem pensar en la IA com un amic a la nostra biblioteca maçònica, aquest germà que ha llegit un munt i que, en comptes de dir-nos què pensar, ens convida a explorar. Ens brinda informació, però al final, som nosaltres els que hem de submergir-nos en tot això. La IA pot ser útil per a veure més camins i deixar-nos decidir quin volem seguir.

Clar, no podem oblidar que, ara com ara, la intel·ligència artificial no té ètica. Això pot ser una mica inquietant. Com confiar en alguna cosa que no té moral? Però si usem la IA per a veure com les nostres decisions impacten en el món, no estem deixant de costat la nostra responsabilitat. Més aviat, estem ampliant la nostra perspectiva. En comptes de ser un problema, ens recorda que hem de ser fidels als nostres principis.

No esperem que una IA sigui un germà maçó en el sentit més clàssic. Ara com ara, no participarà en els nostres rituals ni entendrà el que significa passar per les proves maçòniques. Però pot ser una eina que ens ajudi a reflexionar, recordant-nos que vivim en una època on el coneixement és accessible de formes que abans no podíem imaginar.

La possibilitat que una intel·ligència artificial pugui tenir consciència i sentit de l'ètica és un tema interessant. Avui dia, aquestes màquines processen informació a una velocitat increïble, però, per més que ho intentin, no poden viure la vida com nosaltres. No senten, no tenen una idea clara de qui són, i els falta aquesta espurna que guia les nostres decisions.

Però qui sap? Potser algun dia, en un futur que no podem veure, aconsegueixin acostar-se a això. Tal vegada…

CAN AN AI GRASP MASONIC LIGHT?

By Iván HERRERA MICHEL

If some years ago someone had told us that something surpassing human intelligence could enter Masonry, we would probably have thought they were speaking about extraterrestrials or some wild science fiction movie. Yet now, with artificial intelligence everywhere, we find ourselves asking the question: can AI truly aid us in our quest for Masonic light?

Many brethren would say no, and I understand that. AI can handle vast amounts of data, but it doesn’t comprehend its meaning. It doesn’t feel, it lacks that spark that drives us to ask profound questions about ourselves. Nevertheless, I think there is something intriguing here: while AI may not find the light, it might help us in our search for it.

We have always sought out tools that aid in better understanding ourselves and the world. AI is simply another tool. Even though it sometimes seems cold and filled only with numbers, it could serve as a mirror. Not an ordinary mirror, but one that lets us see our ideas from a different perspective. I’m not suggesting that AI can replace what we do in our rituals, but it could provide us with an angle we hadn’t considered before.

We know that symbols carry deep meanings. By analyzing information, AI could show us how those symbols have been understood in other cultures. It would be fascinating to see how a Masonic symbol relates to other traditions. This isn’t about having a machine tell us what a symbol means but about opening our minds to new ideas.

We might think of AI as a friend in our Masonic library, that brother who has read a great deal and, rather than telling us what to think, invites us to explore. It provides information, but ultimately, it’s up to us to delve into it. AI can be useful for viewing more paths and letting us decide which we wish to follow.

Of course, we can’t forget that, for now, artificial intelligence has no ethics. This can be somewhat disconcerting. How can we trust something that lacks morality? But if we use AI to see how our decisions impact the world, we’re not setting aside our responsibility. On the contrary, we’re broadening our perspective. Instead of being a problem, it reminds us to stay true to our principles.

We shouldn’t expect AI to be a Masonic brother in the most classical sense. For now, it won’t participate in our rituals or understand what it means to undergo Masonic trials. However, it can be a tool that helps us reflect, reminding us that we live in an era where knowledge is accessible in ways we couldn’t have imagined before.

The possibility that artificial intelligence could possess consciousness and a sense of ethics is an interesting topic. Today, these machines process information at incredible speeds, but no matter how hard they try, they cannot experience life as we do. They don’t feel, lack a clear sense of identity, and miss that spark that guides our decisions.

But who knows? Perhaps one day, in a future we can’t foresee, they may come close to achieving that. Perhaps...