jueves, 21 de agosto de 2025

UN LIBRO A CUATRO MANOS CON LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Por Iván Herrera Michel
        
He decidido escribir un libro en conjunto con la inteligencia artificial, nuestra nueva compañera de camino, en un dialogo abierto con ella, que hace apenas un par de años era impensable.
       
No lo hago como un gesto de moda, ni para llamar la atención con la novedad tecnológica, sino como un experimento histórico y cultural que pone en cuestión mi manera de producir conocimiento, de narrar experiencias y de dialogar con el lector.
              
La humanidad siempre ha escrito con las herramientas de su tiempo. Hubo un momento en que la pluma reemplazó al cincel, en que la imprenta multiplicó las voces más allá de los manuscritos monásticos, en que la máquina de escribir mecanizó la prosa, y en que los procesadores de texto digitalizaron la página. En cada uno de esos tránsitos hubo resistencia, temor y desconfianza sobre si se iba a perder la autenticidad del pensamiento. La historia demostró que, por el contrario, la herramienta amplió las posibilidades sin sustituir la esencia de lo humano.
                        
Hoy vivimos una nueva frontera, en la que la inteligencia artificial no es un oráculo ni un autor autónomo; es un instrumento poderoso de organización, contraste y sugerencia. En mi caso, no sustituirá la reflexión Masónica ni el juicio crítico que me corresponde como escritor, sino que me acompañará como soporte metodológico. Me ayudará a sistematizar referencias, a poner en orden mis ideas, a ensayar y corregir alternativas de estilo. Pero las convicciones, las tesis, la orientación filosófica, histórica y humanista seguirán siendo enteramente mías.
               
Entiendo que este proyecto puede, además, contribuir al debate sociológico de fondo. ¿Qué puede significar que la escritura, ese acto tan íntimo y humano, pueda ahora realizarse en colaboración con un ente no humano? ¿Hasta dónde la tecnología transforma nuestras formas de socialización, de transmisión cultural y de construcción de autoría intelectual? Yo mismo no lo sé exactamente, pero recuerdo que la Masonería, que en el siglo XVIII fue pionera en experimentar nuevas formas de sociabilidad ilustrada, tiene mucho que decir en esta conversación y sobre el temor de que las herramientas de nuestro tiempo, no siempre se pongan al servicio de la libertad de conciencia, de la igualdad y de la fraternidad.
                 
Una cosa quiero que quede claro: la ética del libro no radica en ocultar la herramienta, sino en declarar con transparencia su papel. El pensamiento, la mirada crítica, la responsabilidad de cada afirmación son mías, y la inteligencia artificial será apenas un eco, un espejo, un cuaderno ampliado en el que ensayo y ordeno mis ideas.
                          
Comienzo este proyecto consciente de que escribo en un momento de transición cultural, convencido de que los símbolos antiguos todavía alumbran desafíos nuevos, y con la certeza de que usar las herramientas del presente con lucidez y responsabilidad no contradice la tradición, sino que la prolonga en su espíritu más vivo, que es el de explorar caminos inusitados hacia el futuro, porque la verdad no ha estado nunca en la herramienta que se usa, sino en la conciencia de quien se atreve a usarla
                          
                              
            

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena mi muy QH ∴ gran innovación y mejor oportunidad de experimentar esa nueva herramienta. TAF ∴

Anónimo dijo...

Muy acertada tu visión QH ∴. Es más bien un socio invisible que orienta detrás del modo de pensar y amplifica la comprensión de otros temas … Bienvenida la IA … no
Moja pero a veces empapa…

Anónimo dijo...

Me parece una gran idea, muy interesante, estaré pendiente del resultado.